Lo que tienen de especial las cuñas de aislamiento en comparación con otros materiales aislantes en el procedimiento de serrado de pared, es la forma en cuña de las dos placas de aislamiento de 50 cm de longitud. Las cuñas de aislamiento inferior y superior se montan la una sobre la otra, adoptando una forma rectangular que hace que la ranura del corte recupere la resistencia frente a fuerzas externas de inmediato y en toda su superficie. La ranura de corte puede soportar de nuevo directamente cualquier carga que provenga desde arriba.

 

Lo cual corrobora también el informe de ensayo del Instituto Federal para Investigación y Ensayos de Materiales, en Berlín (datos de 2015).

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Las cuñas aislantes se seleccionan de forma que, con una conexión a ras de la capa de cuña anterior (siempre aprox. 1 cm), se cree una ranura de drenaje en forma de cuña en todo el espesor de la pared. El agua del sistema capilar por encima de la junta cortada, puede escurrirse por estas ranuras de drenaje a través de la pendiente de la capa de la cuña inferior y no tiene que drenarse a través de las superficies de la pared, lo que requiere mucho tiempo.